La "U" de Dario Franco es campeón de Copa Chile

En Universidad de Chile dicen que sin sufrir no vale. Y en la final de partido único de Copa Chile ante Universidad Católica disputada en el Estadio Germán Becker, los azules se impusieron 2-1 con un tanto en los suspiros del lance y sumaron a sus vitrinas su cuarto título en el segundo certamen en importancia del país.
Se habían mostrado los dientes ambos elencos en la previa del encuentro: Que no había una segunda oportunidad, que había que ponerlo todo desde el pitazo inicial y que toda la carne debía tirarse a la parrilla advirtieron, y para fortuna de los más de 15 mil espectadores, no fue mentira.
Fue una final atípica. Es que a diferencia de lo que se acostumbra en una definición, desde el inicio de la brega ambos elencos buscaron con mucho vértigo el pórtico contrario, por eso no extrañó que recién a los 4 minutos se inaugurara el tanteador tras un mal despeje de Enzo Andía que capturó Gustavo Lorenzetti para habilitar con excelencia a Isaac Díaz, que batió al meta cruzado con un tiro bajo y cruzado.
Pero los de la franja no se amilanarían por la desventaja y tras acomodarse luego del balde de agua fría, en una buena triangulación que comenzó y finalizó Ismael Sosa, pasando también por Fernando Meneses y Carlos Bueno, encontrarían la paridad a los 13’.
El compromiso mientras avanzaba ganaba en intensidad, ningún equipo quería quedarse con las manos vacías, y debido a lo alto de las pulsaciones, en 28’ Católica se quedó con uno menos por la torpe expulsión de Gonzalo Sepúlveda, al entrarle con una plancha en la cara a Lorenzetti.
Este episodio modificaría en 180 grados el cotejo, pues Martín Lasarte debió mover sus piezas y sacrificar un atacante para equilibrar el mediocampo. Darío Franco, en tanto, apostó por tener la pelota pero quitándole velocidad a los ataques y ante el orden franjeado en la zaga, los laicos no lograron entrar al área.
En el complemento esta sería la tónica y, salvó una jugada preparada que terminó con un remate de Díaz que fue achicado de forma portentosa por Cristopher Toselli, y otra en que el palo devolvió la pelota tras un desvió de Andía contra su propia puerta, casi no hubo ocasiones de peligro.
Eso hasta los minutos finales, cuando los azules metieron con todo para no definir el cetro en los lanzamientos penales y encontraron su recompensa. Tras un tiro libre estrellado en el palo, una doble pared entre Aránguiz y Sergio Velázquez terminó con centro a ras de piso al medio donde Juan Ignacio Duma sólo debió empujarla para salir a celebrar junto a sus compañeros.
Celebración que no sólo significó un partido y un clásico universitario, pues con él la “U” se adjudicó la Copa Chile y, además de las medallas y el premio monetario, se ganó un boleto como Chile 2 para disputar la Copa Sudamericana.
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