CHILE: EL NUEVO ROMAN DIAZ

ANTOFAGASTA, Chile.- Es sabido que a ningún futbolista le gusta ser sustituido en pleno partido por decisiones técnicas. Menos aun, si el resultado y el desarrollo del juego se presentan desfavorables. Muchos de ellos no pueden ocultar su fastidio, e incluso algunos han llegado a tomarse a golpe de puños con su entrenador por este motivo.
Pero lo que hizo Giovanni Narvaez, del Deportes Antofagasta de Chile, es un hecho con muy pocos antecedentes en la historia de este deporte. Al notificarse de la decisión de su entrenador, el jugador perdió la cordura.
Mientras se acercaba a la línea de cal, sin salir del campo de juego, se sacó la camiseta y la llevaba en la mano. Antes de chocar las manos con su compañero Pablo Lavandeira, que iba a sustituirlo, tiró la casaca al aire y la recibió con una violenta patada.
Los hinchas comenzaron a insultarlo por la actitud, y el futbolista no tuvo mejor idea que responderle con gestos obscenos. En ese momento, el árbitro del partido decidió expulsarlo, pero los berrinches no terminaron ahí. Antes de retirarse de la cancha, arremetió con violencia contra un cartel publicitario y finalmente sí, se retiró a las duchas. En las próximas horas se conocerá la sanción del tribunal disciplinario chileno, como así también la que le aplicará la propia institución.