La goleada fue un mazazo que se evidenció rápidamente en el vestuario canalla. La puerta estuvo cerrada por más de 15 minutos. En el playón las versiones se comenzaban a tejer por la dureza de la derrota y el descontrol en el final del partido. Sólo dos hombres estaban al lado de la puerta metálica, con sus brazos cruzados y sus rostros de gran preocupación. Norberto Speciale y Gonzalo Belloso eran los únicos que esperaban para entrar en escena y palpar sensaciones con el cuerpo técnico y jugadores. Después de una breve charla, los dirigentes salieron y fue el presidente canalla quien en diálogo con Ovación ratificó al DT. “No es momento de hacer cambios. El técnico tiene nuestro total apoyo. Creo que es lo mejor que podemos hacer en estos momentos”, señaló Speciale. “A nosotros no se nos pasa por la cabeza ningún cambio”, resaltó.“El resultado fue justo. Los goles los hicieron ellos y el marcador fue contundente. La única manera de salir de esto es seguir trabajando. No queda otra. Parece que los jugadores no tienen confianza en este momento y no la pueden meter”, amplió el mandamás auriazul.Sobre los próximos pasos dirigenciales, apuntó: “Tenemos que seguir esperando a ver si esto se revierte de alguna manera. Las chances de ascender todavía están , aunque es cierto que cada vez es más difícil, sobre todo si no sumamos puntos. Tenemos que seguir peleando”.Unos minutos más tarde, fue el propio Rivoira el que se animó a enfrentar los micrófonos para dejar en claro su continuidad. “Yo me siento con fuerzas para seguir, porque si no hubiera renunciado apenas terminó el partido”, aseguró el Chulo.Así, con las voces oficiales en los momentos oportunos, en el universo canalla quedó claro que, más allá que las malas actuaciones en el arranque del año le acortaron su crédito, por decisión de los directivos, Rivoira seguirá al mando, tratando de encauzar su ciclo y la suerte de Central de cara a sus cada vez más dañados sueños de ascenso.
La Capital
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