El cólico por los puntos olvidados en la nueva casa de Chacarita sigue ahí. Qué jugaron mejor, qué ellos hicieron el gol y se metieron atrás, qué tuvieron más chances. En fin, las declaraciones de varios jugadores de Atlético invitan a pensar que la derrota sigue doliendo. Sin embargo, el plantel "decano" que entrenó ayer en el Complejo Ojo de Agua, bajo las órdenes de Enrique Hrabina, recibió en la noche del lunes, una mini-alegría: el empate de Instituto ante Independiente Rivadavia significó que la punta del campeonato siguiera siendo única y exclusivamente, celeste y blanca.
"Empezamos la semana con un poco de bronca por lo del sábado, pero pensando en el próximo viernes", confesó Carlos Fondacaro. El lateral, además observó el partido de los mendocinos que les permitió seguir solos en la cima, pero a él le sirvió para estudiar a su rival. "Fue un partido parejo, trataremos de profundizar sus fallas", reveló.
"A la semana la empezamos con muchas ganas de sacarnos rápidamente de encima la derrota del sábado. Fue costoso y doloroso pero no nos queda hacer más nada que pensar en nuestro próximo rival", aseguró Fabio Ramos.
El "Pitu" y sus compañeros tuvieron una mañana con ejercicios de potencia y velocidad en su primera parte. Luego, "Quique" repartió pecheras y largó una sesión de fútbol reducido. Hora y media con la cancha dividida en dos. De cada lado, dos equipos de ocho que rotaban su integración cada media hora. Hubo tiempo para que Héctor Álvarez metiera varios goles y para que Enzo Maidana. lo hiciera con una deliciosa chilena.
Por su parte, Julio Buffarini, que ingresó en el complemento ante "Chaca", también comentó que vio el último partido de la fecha 19. "Lo miré en mi departamento. Fue importante para que no nos alcanzaran", explicó. Y sobre Independiente, opinó: "me di cuenta que es una cancha amplia como para jugar".
La Gaceta.
No hay comentarios:
Publicar un comentario