Estaba todo listo para que el plantel de Atlético entrene en el complejo "José Salmoiraghi". Sin embargo, desde el vestuario se tomó una decisión: no entrenar por falta de pago. La medida se entendió por casi dos horas, lo que demoraron en llegar los dirigentes y asumir el compromiso de abonar parte de la deuda en las próximas horas.
Aunque los últimos resultados trajeron tranquilidad en mundo "decano", la calma se rompió, al menos momentáneamente. Los futbolistas habían sido convocados para las 9. Llegaron en grupos y cuando estuvieron todos, pidieron reunirse con el cuerpo técnico para comunicarle su decisión.
Lo que reclaman es un atraso salarial que rondaría los dos meses, según uno de sus voceros, mientras que desde el club, en un principio, indicaban que la deuda es de un mes.
A pesar de todo, los jugadores no se cambiaron y se sentaron a esperar una respuesta por parte de la dirigencia que, por otro lado, informó que dos miembros de la conducción se encontraban abocados a destrabar un pago de la Caja Popular de Ahorros. "En la misma situación están San Jorge y San Martín", deslizó un directivo "decano".
Enterado de los sucedido, el presidente Mario Leito -junto a Luis Narchi- llegó hasta el predio y se comprometió a pagar un sueldo en las próximas horas y dentro de 15 días saldar el resto de lo pautado. Ante las consultas, el directivo comentó que se sintió "dolido por la actitud" pero aseguró que "no le molesta la medida" tomada por el plantel. LA GACETA ©
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