Finalmente, Sergio Galván Rey no jugará en los "santos". Así quedó sentenciado luego de la reunión que los directivos de la entidad de La Ciudadela mantuvieron con el delantero, que vino desde Colombia a pasar las Fiestas de fin de año en Concepción, su ciudad natal. Según una fuente allegada al club de Bolívar y Pellegrini, el histórico goleador del fútbol "cafetero" agradeció el interés, pero por razones personales en estos momentos no puede alejarse de Colombia. "Me costó mucho no aceptar esta oferta, pero luego de conversar con mi esposa, y sabiendo que los chicos ya comenzaron la escuela allá, creí que lo más aconsejable era no cambiarles la vida", se disculpó "Chirola" durante una entrevista que mantuvo con LA GACETA. Ante esta contingencia, y con la premura del caso, los dirigentes de San Martín apuntaron sus cañones para otros horizontes. Se conoció ayer que un empresario les ofreció el pase de Pablo Bastianini, el delantero de 28 años, que la temporada pasada jugó en Boca Unidos, de Corrientes, y luego fichó para Yokohama Marinos, de Japón.El goleador nacido en Zárate (Provincia de Buenos Aires) no se adaptó al fútbol nipón, por eso está estudiando algunas ofertas para volver a jugar en Argentina. Otro equipo que mostró interés en contratarlo es Unión, además de Atlético.Otro delantero que fue ofrecido es Pablo Vázquez, el rosarino que también está en los planes de los "decanos". A los de La Ciudadela les interesa el jugador, pero saben que si Vázquez no se adapta económicamente al actualidad de mercado de pases local difícilmente prosperarán las tratativas.
La Gaceta
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