"Estamos hablando para que haya público visitante en la B Nacional"

El presidente de la AFA, Julio Grondona, dijo que mantuvo reuniones con funcionarios del área de Seguridad del Gobierno para revocar la medida que limita el acceso a los hinchas visitantes en los partidos que se juegan por el campeonato del Nacional B."Estamos hablando para que haya público visitante en la B Nacional", confesó Grondona. La intención de las gestiones es lograr que los simpatizantes de River Plate, que acaba de descender de categoría, puedan asistir a los encuentros que se disputen fuera del Monumental de Nuñez."Ojalá pueda haber público visitante limitado. Estamos hablando que como está limitado enla A pueda haber nacional B", reveló Grondona, aunque advirtió que la decisión finla de la cuestión está en manos de las autoridades.En declaraciones al programa "Ciudad Gotik", que se emite por La Red, dijo además que, una vez que termine la Copa América, el comité ejecutivo dela AFA definirá cuál es el monto que recibirá River por la televisación de los partidos.Grondona reconoció que Boca y River son los "pilares del fútbol argentino" y hay que tenerlos en cuenta "para todos los contratos que se tienen que hacer".Desestimó también las acusaciones que aseugran que la AFA perjudicó al River. "A mí no, al fútbol no le conviene el descenso de River", aseguró Grondona.Asimismo, confesó que el descenso fue "una sorpresa no esperada y cuesta mucho", y descartó que el problema se solucione con la salida del titular del club de Nuñez, Daniel Passarella: "Yo no creo que se pueda solucionar algo con renuncias".En cuanto a la decisión de no sancionar con quita de puntos a River, Grondona dijo que el castigo a Nueva Chicago (le sacaron 18 unidades luego del partido de Promoción frente a Tigre, en 2007) fue diferente: "Son dos cosas distintas, el señor Castrilli (por entonces titular del Subsef) tenía un sistema de quita de puntos; hace cinco años que la AFA no viene sacando puntos".En ese sentido, instó a que se castigue "a quien se tenga que castigar", y argumentó que si fueran ciertas todas las denuncias en su contra no llevaría más de 30 años al frente del organismo que rige los destinos del fútbol local."Es un hecho muy doloroso para el fútbol argentino y para todos", prosiguió el directivo, quien aseguró que son "malpensados" los que lo acusan de perdjudicar a uno de los clubes más populares del país por su enfrentamiento público con Passarella, a quien definió como una persona de "carácter fuerte".