“Tenés que ganar más partidos, si no, no llegás de ninguna manera”. El dueño de la frase es Omar Palma y la referencia tiene que ver con la necesidad del equipo de sumar en condición de visitante. Si hoy Central aún tiene alguna mínima chance de alcanzar alguna de las dos plazas para jugar la promoción es por la mediocridad del torneo, pero también porque los errores cometidos fuera de casa, mal que mal, se remediaron en el Gigante, donde cosechó el 60 por ciento de los puntos disputados. Un cuadro de situación que dista muchísimo si el análisis se invierte. Es que hasta aquí el canalla sumó sólo el 28,57 por ciento de los puntos disputados fuera de su casa. Ningún equipo con aspiraciones puede anhelar algo importante con estos números como aliados. ¿Cuál es la gran contra? Que sólo restan cinco encuentros en condición de visitante y que habrá que aprovecharlos al En este contexto la pregunta que se cae de madura es ¿si Central cosechó apenas el 28 por ciento de los puntos jugando afuera, cómo va a hacer para ganar prácticamente todo lo que le queda? Ese será trabajo de Omar Palma, de su grupo de trabajo y, por supuesto, de sus dirigidos.Mucho se habló de aquel arranque de año que era necesario aprovechar, con cinco partidos, de los primeros siete, en condición de local. Aquellas conjeturas sin dudas abrigaban la idea de que con “algunos puntos” de visitante la cosa era viable. Lo concreto es que esa seguidilla de encuentros en el Gigante no resultó determinante, pero lo que es peor, lo hecho afuera no aportó nada de nada. Por la sencilla razón de que Central aún no logró sumar cuando le tocó viajar en lo que va de 2011.Está claro que el problema viene de arrastre. De hecho, ni Reinaldo Merlo, ni Héctor Rivoira pudieron encontrarle la vuelta a esta situación. Mostaza tuvo un mayor grado de eficacia en ese sentido (38,09 por ciento de los puntos), mientras que lo de Rivoira fue para el olvido, tan sólo el 22,22 por ciento.Este escenario se plantea precisamente en la previa de otro encuentro afuera, ante un rival que si bien viene de sumar de a tres (2-1 a San Martín de Tucumán, de visitante) no es de los más fuertes del campeonato. ¿Pero cómo hacer para despojarse de la idea que las últimas dos caídas se dieron ante el modesto equipo de la CAI y Merlo? Tarea difícil.Un “zarpazo” es lo que considera Palma que el equipo tiene que dar de visitante. Para eso hay que tener “la actitud para que las pelotas divididas sean nuestras. De esa forma nos podemos acomodarnos para ganar afuera”, confió el Negro.Puede hablarse de algunos partidos en particular, pero Central está en el puesto que se merece porque, justamente, nunca hizo más méritos para estar mejor. No será fácil para un equipo que en Arroyito se las viene arreglando como puede, pero que, con un margen de error ya prácticamente nulo, debe mejorar sus producciones fuera de su casa para creer que todavía se puede. Lo hecho hasta aquí es muy pobre y está claro que no alcanza.
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