“Si Independiente Rivadavia baja al Argentino A, le va a resultar más facil salir de ese torne que a algunos dirigentes de la cárcel”, afirmó el empresario Daniel Vila, quien ayer fue agredido durante una reunión que se realizaba en la comisión de deportes de la Cámara de Diputados donde se debatía la creación de la nueva ley del fútbol impulsada por el legislador Vargas Aignasse.Vila es el presidente de Independiente Rivadavia de Mendoza e impulsa cambios radicales dentro de la Asociación del Fútbol Argentino (AFA), a la que pugna por llegar a la presidencia y desplazar al actual mandamás Julio Humberto Grondona.En diálogo con La mañana rosarina de La Tres, Vila contó esta mañana que se sentía “sorprendido” con lo que ocurrió ayer en el Congreso de la Nación. “Averiguando un poco, esto nunca había ocurrido en una reunión en la Cámara de Diputados. Ni siquiera cuando se trató algo tan difícil y discutido como la resolución 125 tuvimos una situación tan violenta como la de ayer”, manifestó el empresario.En una charla con Bigote Acosta, Vila hizo un raconto de lo ocurrido ayer en el Congreso. “La sesión duró una hora 45 minutos. De esa hora 44, estuve escuchando lo que decían los dirigentes que se oponen a ley del fútbol. Todos están en contra pero sin dar los motivos. Cuando me tocó hablar a mí logré hacerlo unos 30 ó 40 segundos, después llegaron los agravios, los insultos y amenazas de agresiones físicas. La presidenta de la comisión, Ivana Bianchi, tuvo que levantar la sesión y yo tuve que salir custodiado del edificio”.Vila identificó a sus agresores como los dirigentes “que firmaron una solicitada en apoyo a Julio Grondona y que se oponen a la ley del fútbol”.“El fútbol es pasional adentro de la cancha, cuando se disputa un resultado. Pero cuando uno está en el Congreso de la Nación donde uno no va a disputar un resultado deportivo, sino a discutir, a debatir una idea, o a enriquecer un proyecto de ley, estando a favor o en contra, lo pasional no existe. Uno no se puede comportar como un barrabrava en el Congreso. Salvo que uno esté acostumbrado a tener esa conducta toda su vida, es decir a no tolerar, a no escuchar.Al ser consultado sobre su actual relación con el titular de la AFA Julio Grondona, Vila fue contundente: “No tengo ninguna relación con Grondona. Hace tiempo que no hablamos. Lo único que recibí en el último tiempo la agresión en la cancha del Quilmes, junto con mi hijo, en donde el secretario de ejecutivo del AFA, encabezando una patota, nos agredió físicamente. Tras cartón no nos cobraron ese gol que está dando la vuelta al mundo. Un pelotazo de 40 metros de nuestro jugador que entró y salió del arco. Los únicos que no lo vieron fueron el árbitro y el juez de línea. Y ahora esta agresión en Diputados. Puede ser que haya una mano negra. Y que esa mano negra se traslade a lo deportivo. Independiente de Rivadavia ya está en zona de promoción. Si hay mano negra es muy efectiva”, graficó.Vila sintetizó su propuesta para cambiar el fútbol argentino. “Lo más simple es la participación de los clubes. Eso es lo más inmediato y más rápido, que se democratice el fútbol, que no sean solamente 49 representantes dentro de los tres mil afiliados que tiene AFA los elijan al presidente. Creo que con 49 voluntades no alcanza para decir que es un sistema democrático y representativo”. Para empresario de medios un segundo paso sería federalizar el fútbol. “No puede ser que en la Argentina se juegue fútbol de primera división en tres provincias: Mendoza, Santa Fe y Buenos Aires, y el resto no tenga fútbol de la primera categoría”. Otra cuestión que asegura Vila no se exhibe en la actual dirigencia de la AFA es la transparencia. “Hay que terminar con la designación de árbitros a dedo. Que los fixtures se realicen por sorteo y no se elaboren en un escritorio. Hay que saber cuáles son las deudas de los clubes, como las van a resolver. Con medidas simples, contundentes y concretas vamos a tener un fútbol distinto”, afirmó.
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