Ricardo Dillón: “Me mandan mensajes para que empatemos”

Una vez más, el destino lo ha puesto frente a una encrucijada. Esa rara mezcla de sensaciones que en el fútbol suelen ser moneda corriente, le llegó casi sin querer. Sin embargo, por la sencilla razón de que está cumpliendo uno de los sueños de su vida (dirigir en la B Nacional), se siente preparado para afrontar el desafío, uno más en este incipiente camino como entrenador de Independiente Rivadavia.Ricardo Horacio Dillon sabe lo que se juega el sábado. Enfrente estará Desamparados, el club que le abrió las puertas para hacer sus primeras armas como DT y al que devolvió a los primeros planos del fútbol Nacional con el ascenso al Argentino A. Todo ello, potenciado por la historia reciente de un duelo caliente que demoró cuatro años en reeditarse.“Siempre de cara a un clásico estar bien es importante. Nosotros venimos bien, vamos a tener un partido muy complicado, en una cancha y frente a un rival muy difícil. Sobretodo en el caso mío, va a ser duro enfrentar un sentimiento, con la familia de por medio. Espero que nosotros podamos ganar el partido y lo podamos disfrutar”, comienza diciendo Cogote. -¿Cómo imaginás el recibimiento de Desamparados para contigo?-Más allá de que seguramente alguno, por la lógica razón de que hoy me toca estar del otro lado, me hará sentir su reproche, el hincha de Desamparados es muy agradecido de lo que hice ahí, me lo hace saber constantemente y además tengo a la familia. Mis hijos son fanáticos de Desamparados y me mandan mensajes para que empatemos, je, pero nosotros vamos a ir a ganar. Y bueno, después el sábado veremos lo que pasa.
-Desamparados viene muy golpeado y ustedes en franca remontada, ¿cuenta eso en los clásicos?-No, los clásicos no tienen historia. Desamparados va a estar esperándonos con mucha avidez, la gente de Desamparados tiene un cierto rencor con Independiente, no hay que esquivarle a esa realidad y creo que se van a hacer eco de eso y van a querer ganarnos, así que hay que prepararse muy bien mentalmente, físicamente y futbolísticamente. Los Andes.