Todavía consternados por el terrible golpe de ayer, el dia después no alcanza siquiera, para encontrarles respuestas a una nueva derrota que preocupa cada vez mas.Después de perder jugando muy mal frente a Defensa y Justicia la fecha anterior, no quedaba más que levantar y conseguir un triunfo como local frente a Gimnasia y Esgrima de la Plata. Lejos de cumplir con la obligación de ganar, Chacarita volvió a perder y a repetir errores básicos.Perder es una circunstancia del juego mismo, pero este grupo de jugadores pierde porque no tiene idea de lo que tiene que hacer dentro de la cancha.Perdido dentro de la cancha, el funebrero sigue sin encontrar un patrón de juego. Ni siquiera mejora cambiando tanta cantidad de jugadores ni modificando el esquema. Parece que el tema pasa por otro lado. No se trata solamente de los interpretes que entran a la cancha, acá también hay una confusión importante en el responsable del equipo, Héctor Rivoira. Volvió a equivocarse en los cambios, dejando a jugadores que tienen poco peso futbolístico y sacando a otros que, pese a todo, mostraron cosas interesantes.Preocupan errores básicos, paso dos veces que luego de un tiro de esquina y una falta a favor, quedamos mal parados y creamos una contra para el rival que de milagro no termino en gol, eso no puede pasar si queres ser un equipo protagonista. Este tipo de falencias llaman la atención.Surgen miles de preguntas y todavía no encontramos las respuestas. Así como decimos que Rivoira es responsable, también hay que decir que el entrenador esta capacitado para recomponer este mal presente,experiencia le sobra.¿Será hora de volver a probar con algunos juveniles? Siempre surge el tema de los pibes cuando las cosas no salen, algunos de ellos (Zaldivia, Nizzo, Piz, Guanca) han demostrado que la camiseta no les pesa.Habrá que encontrar las variantes e ideas futbolísticas necesarias para que este equipo encuentre el mejor funcionamiento.El próximo sábado Chacarita juega el clásico y a mi entender, será el partido bisagra para saber cual será nuestro destino.
Informe Tricolor.
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