River arrancó con una sonrisa su duro viaje por la B Nacional. El apoyo de sus hinchas, el rendimiento de los refuerzos, la calidad del Chori y, sobre todo, los tres puntos que le ganó a Chaca sirven para ilusionarse con un rápido regreso a Primera. “Queríamos volver a sonreír” dijo el Pelado Almeyda tras su primer partido como técnico de River. Y la sonrisa regresó. Es cierto que el triunfo 1 a 0 sobre Chacarita no contó con la vistosidad o con la contundencia que algunos esperaban, pero en el arranque de este duro y largo camino que le espera al Millo en la B Nacional, la confianza de los primeros tres puntos era tan necesaria como algunas gotas de agua en el Sahara. Para los jugadores y, sobre todo, para los golpeados hinchas.La sonrisa del técnico fue extensiva para esa gente que, después de varios meses, pudo irse de su cancha feliz. A pesar de que sólo hubo entradas para socios, de que fue en un día laboral y de la molesta lluvia que cayó durante todo el día, la hinchada acudió en masa para alentar al equipo y cumplió: durante los 90 minutos el aliento bajó de las tribunas. Algo que, así como el triunfo, renovó el compromiso de los jugadores, “Leones”, como definió el Chori Domínguez a sus compañeros.Antes de que nadie pudiera terminar de acomodarse River ya estaba en ventaja. Una jugada preparada terminó con el cabezazo al gol del uruguayo Díaz y el desahogo de miles. Podrían haber llegado más gritos pero el buen papel de Chaca en el complemento lo terminó haciendo justo. Se sucedieron cruces, se metió mucho en la mitad y se entendió la importancia de las bolas paradas. Y con eso grabado a fuego para lo que viene, el arco imbatido y los tres puntos son motivos de festejo.
River dio el primer paso, quizás el más difícil, sobre suelo firme. Deberán venir muchos más si el Millo pretende regresar a Primera al final de la temporada, pero el acople de los refuerzos con los pibes fue satisfactorio e invita a la ilusión. Sólo dos entrenamientos separan a River del viaje a Mendoza para encarar la segunda fecha contra Independiente Rivadavia, el sábado. Pero arrancando con una sonrisa, es más fácil.Ole.
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